lunes, 22 de diciembre de 2008

LA FIESTA QUE CANTA EL DON DE LA VIDA



Me pregunto qué celebra en estos días un no creyente?... ¿La Fiestas de los Niños, de la familia, o en la línea de Neopaganismo que nos invade, la fiesta del Invierno?...

Y como no podía ser de otra forma, en este mundo que parece que ha renunciado a sus raíces cristianas, se oyen expresiones como "estoy deseando que pasen estas fiestas", etc. Con esa visión desencantada es comprensible lo de "las navidades me ponen triste". La Navidad es algo más que hacer "suegring" ir de compras, o vivir de recuerdos de los buenos tiempos pasados.

Probablemente con la crisis, muchas personas redescubrirán la realidad auténtica, espiritual y esperanzadora de la Navidad. Fiesta de la familia cristiana, de alegría serena, sin necesidad de petardos.

El Papa Benedicto XVI, durante la audiencia general del pasado 17 de Diciembre resumió la esencia de la Navidad y nos ofrece una visión fresca y esperanzadora de unos días de profundo sentido cristiano.




"Por el clima que la caracteriza, la Navidad es una fiesta universal. Incluso quien no se profesa creyente, de hecho, puede percibir en esta celebración cristiana anual algo extraordinario y trascendente, algo íntimo que habla al corazón. Es la fiesta que canta el don de la vida.


El nacimiento de un niño debería ser siempre un acontecimiento que trae alegría: el abrazo de un recién nacido suscita normalmente sentimientos de atención y de premura, de conmoción y de ternura. La Navidad es el encuentro con un recién nacido que llora en una gruta miserable. Contemplándolo en el pesebre, ¿cómo no pensar en tantos niños que aún hoy ven la luz en una gran pobreza, en muchas regiones del mundo? ¿Cómo no pensar en los recién nacidos no acogidos y rechazados, a los que no llegan a sobrevivir por falta de cuidados y atenciones? ¿Cómo no pensar también en las familias que quisieran la alegría de un hijo y no ven colmada esta esperanza? Bajo el empuje de un consumismo hedonista, por desgracia, la Navidad corre el riesgo de perder su significado espiritual para reducirse a una mera ocasión comercial de compras e intercambio de regalos.

En verdad, sin embargo, las dificultades y las incertidumbres y la misma crisis económica que en estos meses están viviendo tantas familias, y que afecta a toda la humanidad, pueden ser un estímulo para descubrir el calor de la simplicidad, de la amistad y de la solidaridad, valores típicos de la Navidad. Despojado de las incrustaciones consumistas y materialistas, la Navidad puede convertirse así en una ocasión para acoger, como regalo personal, el mensaje de esperanza que emana del misterio del nacimiento de Cristo.

Todo esto, sin embargo, no basta para asimilar plenamente el valor de la fiesta a la que nos estamos preparando. Nosotros sabemos que ésta celebra el acontecimiento central de la historia: la Encarnación del Verbo divino para la redención de la humanidad.


En Navidad por tanto no nos limitamos a conmemorar el nacimiento de un gran personaje; no celebramos simplemente y en abstracto el misterio del nacimiento del hombre o en general el nacimiento de la vida; tampoco celebramos sólo el principio de una gran estación. En Navidad recordamos algo muy concreto e importante para los hombres, algo esencial para la fe cristiana, una verdad que san Juan resume en estas pocas palabras: “El Verbo se hizo carne”.Se trata de un acontecimiento histórico que el evangelista Lucas se preocupa de situar en un contexto muy determinado: en los días en que se emanó el decreto del primer censo de César Augusto, cuando Quirino era ya gobernador de Siria

La Navidad es una oportunidad privilegiada para meditar sobre el sentido y el valor de nuestra existencia. El aproximarse de esta solemnidad nos ayuda a reflexionar, por una parte, sobre el dramatismo de la historia en la que los hombres, heridos por el pecado, están permanentemente buscando la felicidad y un sentido satisfactorio de la vida y la muerte; por otra, nos exhorta a meditar sobre la bondad misericordiosa de Dios, que ha salido al encuentro del hombre para comunicarle directamente la Verdad que salva, y hacerle partícipe de su amistad y de su vida.

Preparémonos, por tanto, a la Navidad con humildad y sencillez, disponiéndonos a recibir el don de la luz, la alegría y la paz que irradian de este misterio. Acojamos la Navidad de Cristo como un acontecimiento capaz de renovar hoy nuestra existencia. Que el encuentro con el Niño Jesús nos haga personas que no piensen solo en sí mismas, sino que se abran a las expectativas y necesidades de los hermanos. De esta forma nos convertiremos también nosotros en testigos de la luz que la Navidad irradia sobre la humanidad del tercer milenio. Pidamos a María Santísima, tabernáculo del Verbo encarnado, y a san José, silencioso testigo de los acontecimientos de la salvación, que nos comuniquen los sentimientos que ellos tenían mientras esperaban el nacimiento de Jesús, de modo que podamos prepararnos a celebrar santamente la próxima Navidad, en el gozo de la fe y animados por el empeño de una conversión sincera."

Leer texto completo
http://www.parroquiatorrelodones.com/2008/12/20/benedicto-xvi-navidad-la-fiesta-que-canta-el-don-de-la-vida/




Los villancicos son una conmovedora tradición popular que refleja la fe de una sociedad cristiana y no debemos dejar que se pierda. Ya lo dijo Pablo VI, "la familia que reza unida, permanece unida". Y san Agustín: "Qui cantat, bis orat": quien canta, reza dos veces... A qué estamos esperando?

Para acabar con una sonrisa os recomiendo el "Divorcio a la Catalana":


Jordi llama desde Barcelona a su hijo Oriol, que emigró a Nueva York y le dice:
-"Lamento arruinarte el día, pero tengo que informarte de que tu madre y yo nos estamos divorciando. 45 años de sufrimiento es suficiente."

- "Papi, ¿de qué estás hablando? ¡Y justo antes de las fiestas!" grita el hijo.

- "No podemos soportar seguir viéndonos" le contesta el padre "estamos hartos el uno del otro, y estoy cansado del tema, así que es mejor que tú llames a tu hermana Montse en Chicago para contárselo" ... y cuelga el teléfono.

Desesperado, el hijo llama a su hermana, y Montse explota:
- "¿Cómo que se están divorciando? ¡Yo me voy a hacer cargo del asunto!

Inmediatamente la hija llama al padre y le dice:
- "¡ Vosotros no os divorciáis! No hagáis nada hasta que yo llegue. Ahora mismo vuelvo a llamar a Oriol, y vamos los dos para Barcelona. Hasta entonces no hagáis nada. ¿Te has enterado bien?"

El padre deja el teléfono, mira a su esposa y le dice:
- "Muy bien, Eulalia, todo ha salido perfecto...Los dos vienen para las fiestas y además...¡¡¡¡ Se pagan el viaje !!!"



F E L I Z N A V I D A D P A R A T O D O S !!!

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues yo no lo celebro de ninguna manera porque no tengo nada que celebrar, más bien que olvidar, algo difíil con la turra que nos están dando por todos los lados con tanta feliz navidad y leches.
Un besitos!

ROSTAM dijo...

Hola Sarinha, A mí tampoco me gusta el bombardeo publicitario y consumista, ni la pose hipócrita de tanta gente... De todas formas, amiga Sarinha, Feliz Navidad!!!, (sin leches).

Besotes

Anónimo dijo...

Estas fiestas, como todas, han perdido su sentido primero, ahora son sólo una vorágine de consumo. Aún así ¡feliz Navidad!

ROSTAM dijo...

Hola Max. Me parece que la vorágine de consumo va aplacándose dadas las circustancias económicas.

Cierto que si estás fiestas no recobran su sentido original cristiano se convierten para muchos en una farsa vacía de contenido, que se intenta suplir con bengalas y gastos. Es lógica su frustración.

Pero para otros será un estupendo descubrimiento lo bien que se está siendo coherentes con la fe y así sí que se celebran y disfrutan las fiestas, "con fundamento" como diría Arguiñano.

Un abrazo y feliz Navidad

Anónimo dijo...

Feliz Navidad amigo ROSTAM.

Recibe un abrazo y mis mejores deseos

ROSTAM dijo...

Necronomicón.net Qué también tengas una Feliz Navidad llena de alegría con las personas que quieres y que te quieren, que serán un montón.

Un abrazo

Salva dijo...

Buenas y feliz navidad.

Yo soy Ateo y me gusta la navidad. Que sea Ateo no quiere decir que no respete las tradiciones y costumbres de tu religión. Me parece una época del año muy bonita.

Igual de bonita que la fiesta del cordero o la fiesta del ramadán.

Por cierto, la navidad en sus inicios fue una celebración pagana. Es otra fiesta que se cristianizó ya hace algunos años.

Saludos y felices fiezzztas

M. Domínguez Senra dijo...

Qué maravilla de ... ¿jukebox? con tanto donde elegir y todo bueno. Estoy muy de acuerdo en que hay que celebrar la Navidad y hacerlo en su pureza original, sin los elementos de la orgía consumista, etc. a los que no hay que conceder ni pizca de atención.
Por lo tanto, ¡Feliz Navidad!

Santiago Chiva, Granada dijo...

Hola. Se habla mucho de consumismo en Navidad.
Este vídeo http://es.youtube.com/watch?v=tg7Gw6raN90 parte de un spot que hicieron diversas confesiones cristianas de Estados Unidos -la llamaron The Advent Conspiracy, la Conspiración del Adviento- para sensibilizar a la población contra el consumismo extremo y para favorecer un estilo de vida sobria, a la vez que se animaba a ser generoso en iniciativas sociales. Me ha gustado el mensaje positivo que trasmite. Quizá te guste.
Un saludo y Feliz Navidad
Santiago Chiva
Granada, España

ROSTAM dijo...

Hola Salva, me alegra comprobar que tenemos bastante puntos en común.

La Navidad ciertamente gusta de hecho a millones de personas que no son cristianas o no practican.

Al mismo tiempo creo que la sociedad de consumo desvirtúa la esencia de la Navidad como fiesta religiosa, con un profundo sentido para los creyentes cristianos.

Por cierto, yo también disfruto en fiestas como el año nuevo chino, el nowrooz kurdo e iraní, o el eid musulmán. Lo paso bien, pero no lo celebro desde el punto de espiritual, si me explico.

Un saludo Felices Fiestas

ROSTAM dijo...

Amiga Aaoiue, Gracias por tu comentario pero ya has visto que he incluido el maravilloso villancico gitano que pusistes en tu blog. No lo conocía y quedé "epatado".

Siempre es un placer coincidir contigo amiga mía. que pases unas Felices fiestas y que el 2009 te traiga la Paz y la Felicidad que deseas, con las personas queridas

ROSTAM dijo...

Hola Santiago Chiva. Bienvenido al blog y gracias por tu comentario.

Te confieso que no he conseguido ver todavía el vídeo pero es un tema que me interesa.

Apuntas dos temas claves y que van juntos; animar a una vida más sobria y una mayor preocupación por los temas sociales.

La sociedad del "bienestar" tiene muchas ventajas pero también insensibiliza a la población, incapaz del menor sacrificio por los demás. Teóriamente sí claro, pero en la práctica es una sociedad egoista y poco a poco deshumanizada.

Un abrazo, que tengas unas Felices fiestas en tu bonita tierra y hasta pronto

Anónimo dijo...

Bellísimo post, Rostam, te felicito. Te deseo en el año que está por comenzar mucha salud, bienestar y fe en que siempre podremos aspirar a un futuro mejor. Un abrazo

ROSTAM dijo...

Querida amiga Mary. Conocer personas como tú ya es una bendición. Tu felicitación es preciosa. Gracias.

Deseo para el año que comienza que sigas siendo como eres y que la felicidad colme tus días.

Un abrazo para ti, para Villa Clara y todos los cubanos

victoria luque dijo...

Hola. Feliz navidad.Acabo de conocer tu blog. Ojalá los cristianos sepamos transmitir con nuestra vida, lo que el Señor está haciendo en cada uno de nosotros. Y ojalá tengamos ojos nuevos para verlo.
Saludos afectuosos.

ROSTAM dijo...

Victoria Luque. Gracias por tu comentario y bienvenida al blog.

Comparto tus deseos y verdaderamente es necesario redescubrir el sentido humano, es decir cristiano, de la vida para no caer en la desesperanza.

Saludos muy afectuosos

lunallena dijo...

Hola Rostan, ójala pudiéramos transmitir a los demas que cuando se da un sentido cristiano a estas fiestas se viven de otra forma, y para ello no hace falta ni grandes cenas, comidas, regalos etc. basta ilusión, ganas de quererse de verdad y olvidar los malos "rollos" o malos tragos que hayas podido tener con los demás. A veces esto es dificil, pero para eso hay que "Creérselo y Quererlo".
¡FELIZ NAVIDAD¡